La portavoz del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Logroño, Celia Sanz, ha defendido este miércoles la tramitación «adecuada» de la Ordenanza de Terrazas de la ciudad -contestada desde algunos colectivos, que han planteado incluso presentar una querella-, además de asegurar que una menor reducción del horario -media hora en fines de semana y festivos, en vez de una hora- «está justificada y avalada técnicamente».
A preguntas de los medios de comunicación, y ante la previsión de la aprobación inicial de la Ordenanza en el pleno municipal de mañana, Sanz ha explicado que «este equipo de Gobierno tenía muy claro que una de las necesidades que planteaba la ciudad de Logroño era precisamente reordenar el espacio público teniendo en cuenta cuál era la situación a la que se había llegado tras la pandemia por el tema de las terrazas».
En este marco, ha señalado que «nuestro objetivo ha sido siempre el mismo, buscar una convivencia y un equilibrio entre lo que es el derecho al descanso de los vecinos de la ciudad y la dinamización de una actividad económica que desde luego entendemos es muy importante para esta ciudad como es el sector de la hostelería».
Ha recordado que «nos encontramos con una situación que estaba absolutamente abandonada por el anterior equipo de Gobierno que lo único que había hecho era ir solventando los distintos decretos que se fueron dictando con la pandemia y tras la pandemia», pero ha defendido que, tras la finalización de este episodio «había que volver a reordenar las terrazas».
Algo que este Gobierno local optó por abordar mediante una nueva Ordenanza, «sobre tres premisas fundamentales». La primera, «reordenar el espacio público y reducir el espacio que ocupaban las terrazas»; en segundo lugar, reducción de horarios; y el tercer pilar, «una proporcionalidad entre el espacio ocupado por las terrazas y los metros que un negocio tenía concedidos en la licencia».
De acuerdo, con estas tres premisas, «el Ayuntamiento comienza a trabajar y abre un proceso participativo abierto a toda la ciudadanía, en el que nos hemos reunimos absolutamente con todas las entidades: Federación de Vecinos, Demanda Casco Antiguo, Logroño Sin Ruido, hostelería».
Un proceso que duró «varios meses» y tras el que se elaboró el primer borrador de la norma, que pasó a aprobarse en Junta de Gobierno Local, lo que dio paso a las enmiendas «por parte de los Grupos Municipales, no por la ciudadanía». De las entre 50 y 60 presentadas por todos los Grupos, se han aprobado «parcialmente dos»: una del PSOE, sobre un cambio en la terminología de los espacios de los locales, y otra, de VOX, sobre los horarios.
Sanz ha especificado que ésta última ha supuesto que, si en el borrador inicial, los horarios se reducían en una hora en todos los actuales -para cerrar a las 00 horas entre semana y a la 1 de la mañana en fines de semana y festivos-, ahora queden sin cambio con una reducción de una hora entre semana -siguen cerrando a las 00 horas- pero que, en festivos y fines de semana, la reducción no sea de una hora, sino de media, de modo que se cerraría a la 1,30 horas de la madrugada.
Una decisión -que es la que ha ocasionado las principales quejas- que, en palabras de la portavoz municipal, «está justificada y avalada técnicamente en que, cuando se da un horario de cierre se entiende que, en ese momento, la terraza tiene que estar desalojada y recogida para esa hora».
De este modo, ha proseguido, «cerrar a la 1 suponía que había que ir inadmitiendo clientes a partir de las 12,30 horas, con lo que, en la práctica, la reducción horaria sería de hora y media». Dejando la reducción -«porque se sigue reduciendo el horario», ha insistido Sanz- en media hora supone que, en la práctica, se reduzca una hora el horario final.
SUPERFICIE.
Además, la portavoz ha señalado que, en la Ordenanzas, «se reduce también la superficie afectada» y la proporcionalidad en base a unos parámetros que hacían referencia al espacio útil que «en el borrador se preveía que era aquel destinado a barra de bar», pero que, con la enmienda socialista, contempla finalmente también otros espacios, como los servicios o el almacén, aunque el máximo seguirán siendo 100 m2.
También se han aumentado las sanciones, «siendo más rigurosos, enfocadas ya no tanto en recaudar, que también, sino en el hecho de concienciar que el incumplimiento de la norma puede dar lugar a una revocación de la terraza, de la licencia de terraza, con una mayor celeridad»; y, sobre el apilamiento, en general «no se permite que dejar materiales fuera del establecimiento cuando el establecimiento permanezca cerrado».
Con estas premisas, «mañana se lleva este borrador a aprobación inicial en el pleno, ahí se abrirá un período de audiencia y exposición pública por 30 días donde toda persona interesada podrá formular las alegaciones que tenga pertinentes».
A partir de ahí «el Ayuntamiento de Logroño tendrá que contestar de manera motivada, razonada y con sustento y solvencia técnica si admite o no admite esas alegaciones, y el siguiente paso sería elevar a pleno la aprobación definitiva», para la que no ha podido avanzar una fecha.
En todo caso, sí ha asegurado que «tenemos intención de hacerlo desde luego a lo largo de este año, con idea de que a finales del 2025 pueda estar aprobada esta nueva Ordenanza de Terrazas que consideramos es necesaria para la ciudad de Logroño».
QUERELLA.
Y preguntada explícitamente por la querella «por prevaricación ambiental» anunciada ayer por Demanda Casco Antiguo, Celia Sanz ha defendido que «este equipo de Gobierno ha seguido a pies juntillas la tramitación administrativa que establece la norma».
A partir de esta base, no ha negado que «un particular, una entidad, pueda ejercer su derecho a interponer el recurso administrativo que crea pertinente, en vía administrativa, incluso que se dirija a los tribunales de justicia por la vía contenciosa, por la vía administrativa porque esté en desacuerdo con lo que este equipo de Gobierno está haciendo».
Así, ha citado incluso «una demanda ya presentada en el Juzgado de lo contencioso por los hosteleros porque han recurrido la aprobación definitiva de las Zonas de Protección Acústica Especial».
«Por lo tanto -ha añadido- cualquier recurso que se haga por la vía administrativa, este equipo de Gobierno entiende que, por supuesto, tendrá que cada parte defender y motivar razonadamente su postura. Pero también les tengo que trasladar que en una querella criminal estamos hablando de un procedimiento penal. Eso hay que estudiarlo».
Ha incidido al respecto en que «el derecho penal es restrictivo de derechos, no es lo mismo decir vamos a interponer un recurso contencioso que hablar de una querella criminal, sobre todo cuando les digo que el equipo de Gobierno ha seguido a pies puntillas la tramitación que la norma establece».
«La única valoración que vamos a hacer es insistir en que esa tramitación es conforme a ley. La judicialización de los asuntos es algo más que toca dentro de la responsabilidad, porque el desacuerdo en los planteamientos puede existir, pero desde luego creemos que hablar en términos de querellas es algo que creemos que hay, cuando menos, estudiarlo y meditarlo«, ha finalizado Celia Sanz.