Correos ha emitido este martes un sello del emblemático patrimonio histórico de Logroño: la Puerta del Revellín, también conocida como Puerta de Carlos V o Puerta del Camino.
Esta emisión comparte protagonismo con la Iglesia de San Salvador de Vilar das Donas, ubicada en la localidad lucense de Palas de Rei. Ambos timbres se enmarcan dentro de la serie dedicada al patrimonio artístico español.
Logroño, como localidad de frontera entre los reinos de Castilla y Navarra, dispuso de una muralla que rodeaba su perímetro y que constituyó su principal sistema defensivo junto a una fortaleza en la cabecera del puente sobre el Ebro.
En 1521 sufrió el cerco de las tropas franco-navarras de Francisco I lideradas por André de Foix. Aunque el cerco fue levantado y las tropas enemigas derrotadas en Noain días después, el emperador Carlos ordenó reforzar el sistema defensivo de Logroño, ciudad considerada Puerta de Castilla.
Y así se alzó un cubo artillero, un nuevo lienzo de muralla y una nueva puerta en la zona occidental de la ciudad: el cubo y puerta del Revellín. Dicha construcción se llevó a cabo con fuentes de financiación muy diversas (salinas de Atienza, alfolí de Avilés, juro del Mariscal de Navarra, penas de cámara, entre otras) entre los años 1522 y 1524, con algún remate en 1525.
La construcción del lienzo de muralla colindante se demoró más en el tiempo. La muralla está construida con piedra de sillería isódoma a soga por sus dos caras.
La puerta tiene un gran arco rebajado lobulado sobre el que sobresale un cuerpo de mayor altura, que presenta en el frente decoración heráldica esculpida: son tres escudos, ubicándose el del monarca Carlos en el centro (con el águila bicéfala), flanqueado a ambos lados por sendos escudos de menor porte que corresponden a un escudo municipal de Logroño con tres flores de lis y otro, muy deteriorado, que sería su gemelo.
El conjunto se bordea con una moldura ornamentada con bolas. La Puerta del Revellín fue también conocida como del Camino, al discurrir por ella el Camino de Santiago y asomar al Camino Real de Castilla. Es un entorno muy significativo de Logroño, un auténtico símbolo de identidad de la ciudad.
Este sello se suma a otras emisiones emblemáticas de Logroño, como las dedicadas al Puente de Piedra, el Casco Antiguo y el último timbre emitido hace 4 años conmemorando el V centenario del asedio de la ciudad en 1521.
La filatelia promueve el conocimiento en todos sus aspectos, todo lo relevante para las personas se ha mostrado en un sello como el que hoy se pone en circulación. En este caso se centra en la difusión y reconocimiento del patrimonio artístico del país y forma ya parte de las colecciones de las decenas de miles de filatélicos de España.
El sello dedicado a la Puerta del Revellín de Logroño se puede adquirir en las oficinas de Correos, a través de Correos Market, contactando con el Servicio Filatélico en el e-mail atcliente.filatelia@correos.com, o llamando al 915 197 197.






